Los hechos ocurrieron en la ciudad argentina de Posadas. En ella se estaba celebrando el 27 Encuentro Nacional de Mujeres de Argentina, a la sazón un congreso de feministas radicales. Y tal como ha ocurrido otras veces su objetivo principal era la Iglesia,
Un grupo de unas 500 de estas feministas acudía de manera violenta hacía la catedral con el fin de profanarla. Por el camino fueron sembrando la ciudad argentina de pintadas contra la Iglesia Católica.
Tal y como informa Aci, un grupo de jóvenes católicos se concentró en el atrio de la catedral para evitar de manera pacífica que el templo fuese profanado por la turba. Estos hicieron una cadena humana y comenzaron el rezo del Rosario.
Sin embargo, esto enfureció aún más a las feministas que comenzaron a agredir a los jóvenes. Mientras tanto, los católicos permanecieron firmes y sin responder a las agresiones.
"La iglesia que ilumina, la que arde"En las imágenes se puede observar como rociaron de pintura a los jóvenes tanto en su ropa como en sus caras. Igualmente fueron escupidos e insultados mientras intentaban provocarles para que respondieran, algo que no consiguieron.
A su vez, consiguieron llenar de pintadas la fachada de la catedral. Se podían leer cosas como "la única iglesia que ilumina es la que arde", "curas violadores" o "ni Dios, ni patrón, ni marido" mientras cantaban "¡Iglesia basura, vos sos la dictadura!".
Finalmente, los jóvenes pese a las dificultades consiguieron evitar la profanación y todo ello sin la ayuda de la Policía.
Por su parte, el obispo de Posadas calificó a las feministas de "profesionales de la provocación y la violencia" y pidió que se haga justicia para que las agresiones sufridas por los jóvenes no queden impunes.
Además, el prelado adelantó que las pintadas en la catedral no serían borradas durante dos días para que la ciudadanía fuera consciente y reflexionara sobre el ataque de estos grupos feministas y proabortistas.
No es la primera vezA pesar de lo ocurrido en Posadas, estos hechos están dejando de ser novedad y no es la primera vez que se producen estos ataques a las catedrales. En otra edición del congreso de feministas la víctima fue la catedral de Nequen.
Los hechos fueron muy similares pero también consiguieron evitar la profanación de la catedral. Un joven católico de los que participó explicó que "la idea propiamente de la defensa de la Catedral surgió de los jóvenes asistentes por necesidad" pues sabían que la turba trataría de atacar "la catedral del lugar, se la pinta, se la apedrea, entonces, como miembros e hijos que somos de la Iglesia, ¿cómo no defenderla?".
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